Mujer en la ciencia
La importancia de la mujer en la ciencia ha sido notable, y no sólo en la actualidad. Sino que, a lo largo de la historia, la mujer ha tenido un rol importante en el desarrollo de diferentes
La importancia de la mujer en la ciencia ha sido notable, y no sólo en la actualidad. Sino que, a lo largo de la historia, la mujer ha tenido un rol importante en el desarrollo de diferentes campos. Estos les ha permitido avances notables en la ciencia, logrando el avance tecnológico de la humanidad.
Aún se puede evidenciar que existe una brecha en las mujeres dentro del mundo científico, provocando que potenciales talentos para la innovación y la creatividad no sean aprovechados en su totalidad.
En este artículo, como parte de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, desde Sexado de Aves hablaremos de toda la importancia que ha tenido históricamente para el desarrollo científico de la humanidad.
En la actualidad, es fundamental que se realice un esfuerzo de los grupos de interés que permita desarrollar mayores oportunidades y una buena gestión del conocimiento que pueda promover la igualdad de género en los diferentes campos científicos.
La historia ha demostrado que la mujer ha sido de gran importancia en el desarrollo científico de la humanidad, y casos como los de Marie Curie o Hipatia de Alejandría son un ejemplo de ello.
Contribuciones históricas de la mujer en la ciencia
La mujer en la ciencia ha contribuido de gran manera desde la antigüedad. Los estudios históricos, críticos y sociológicos de este importante hecho se han convertido en sí misma, en una disciplina académica.
En diferentes civilizaciones antiguas occidentales, por ejemplo, existieron mujeres dedicadas al campo de la medicina. Así como el estudio de la filosofía, el cual estaba abierto a las mujeres, por ejemplo, en la Antigua Grecia.
En la Edad Media, es un hecho que las mujeres hicieron también aportaciones a la protociencia de la alquimia dentro del siglo I y II d. C., donde los conventos cumplían con la importante función dentro de la educación femenina, y en este sentido, varias de estas instituciones les aportaron a las mujeres la oportunidad de poder participar dentro de la investigación académica.
Por otra parte, y con la llegada del siglo XI, se empezaron a fundar las primeras universidades, donde debido a esa brecha de género propia de aquellas épocas, las mujeres quedaron excluidas de ellas en su mayoría.
Eso sí, fuera del campo académico, fue la botánica el ámbito científico que más logró beneficiarse de las aportaciones femeninas al comienzo de la Edad Moderna.
Transición del siglo XVIII al siglo XX
En Italia, por ejemplo, parece que reinó una actitud mucho más abierta con respecto a otros lugares hacia los estudios de la medicina por parte de las mujeres. En este sentido, la primera mujer en la ciencia que logró una cátedra dentro de una disciplina científica, fue Laura Bassi, en Italia durante el siglo XVIII.
Si bien los roles de género estaban claramente definidos para el siglo XVIII, las mujeres avanzaron de una manera visible dentro de la ciencia. A pesar de que en el siglo XIX se les continuaba negando el acceso a muchas mujeres a la educación científica formal, si que comenzaron a ser admitidas dentro de las sociedades educativas con menor nivel.
Ya en el siglo XX se generó un gran cambio para la mujer en la ciencia; pues la cantidad de mujeres que estudiaban en las universidades aumentó de manera significativa. Pues empezaron a ofrecerse diferentes trabajos remunerados a las mujeres que se quisiesen dedicar al mundo de la ciencia.
Un gran ejemplo de una mujer en la ciencia es Marie Curie. Ella fue la primera mujer en ser galardonada con un Premio Nobel de Física en el año 1903.
Fue además la primera y hasta ahora, la única persona en conseguir dos premios dentro de dos disciplinas científicas. Pues obtuvo en 1911 el Nobel de Química, y en ambos casos por su trabajo con respecto a la radiactividad.
Ya en la actualidad, hay 53 las mujeres en total que han recibido un Premio Nobel desde 1903 hasta 2019.